viernes, 1 de octubre de 2010

Rosa: Sonrisas



Muchas veces me han dicho que parezco una persona feliz porque sonrío mucho y es algo de lo que estoy orgullosa, por eso hoy un día de esos en que tus pensamientos avanzan más rápido de lo que tu mismo puedes controlar me he dedicado a “robar” sonrisas y la verdad he encontrado muchas más de las que creía que iba a encontrar:

-Sonrisas de esas que regalas a toda la gente que te cruzas un día de esos en los que te levantas con tan buen humor que notas que irradias energía positiva contagiando a todo el que pasa.


-Sonrisas que notas en la voz, como cuando llamas a alguien y notas que le cambia la voz al descubrir que eres tú porque se alegra un motón de que por fin te hayas decidido a llamar.


-Sonrisas de ternura al ver a ese niño pequeño cometer ese error que tú y otros muchos cometieron con su edad, o al verle mirar y hablar a su madre con completa admiración y devoción.


-Sonrisas al ver a esa persona que hace tanto tiempo que no veías y tanto has echado de menos.


-Esa sonrisa de tonto que se te pone cada día cuando ves a la persona que quieres, y que si tienes suerte es correspondida con otra igualita.


-Sonrisas que se marcan en tu cara al recordar esos buenos momentos que has pasado con gente que en algún momento ha sido importante en tu vida, y que a veces nos hace pensar que “cualquier tiempo pasado siempre fue mejor”. Con algunos podemos vivir otros muchos momentos que al recordarlos en el futuro nos hagan sonreír, y con los que ya no están debemos sonreír el doble porque mientras estuvieron fuimos importantes para ellos y si pudieran ellos también sonreirían al pensar en nosotros.


-Sonrisas de complicidad cuando miras a la otra persona y sin articular palabra los dos sabéis que en que estáis pensando, y la mayoría de las veces el resto de la gente es mejor que no lo sepa.


-Sonrisas que aparecen cuando oyes una canción o ves una foto por casualidad, y ello te recuerda ese momento tan especial.


-Sonreír involuntariamente cuando piensas hacer alguna pequeña maldad…


-Sonrisas que no te entran en la cara de grades que son, con las que pareces un anuncio de Happy Meal.


-Sonrisas al brindar diciendo “por nosotros!!!”


-Sonreír cuando ves que la otra persona pone la cara que sabías que iba a poner y te das cuenta que sois todo complicidad.


No soporto a la gente amargada, esa que siempre ve el lado malo de las cosas, que siempre tiene algo malo que contar o alguien a quien criticar, una razón para protestar o incluso para llorar, porque ya dice el dicho que la felicidad no es una meta sino un estilo de vida, pero hay gente que se empeña en no ser feliz. Porque sonreír es importante pero hacer sonreír a la gente lo es aún más.


Y es que si sonríes cuando eres feliz, cuando ves a gente que lo es, cuando piensas en lo feliz que puedes llegar a ser, si sonríes cuando escuchas, cuando recuerdas, cuando imaginas y sobre todo cuado sientes ¿Cómo no sonreír siempre?


La Pinturilla Rosa es sin duda una de mis favoritas.